Los robots industriales son brazos robóticos que pueden moverse en varias direcciones y pueden programarse para realizar muchos tipos de tareas en diferentes entornos. Estos robots industriales pueden trabajar
En entornos variados como cámaras de alta presión y de vacío.
En salas de trabajo limpias y en áreas terriblemente sucias.
En zonas peligrosas en las que existen amenazas de explosiones, infecciones, radiaciones u otros peligros extremos para los seres humanos.
Los brazos robóticos pueden estar equipados con pinzas especializadas para trabajar con objetos delicados y frágiles, mientras que otros brazos robóticos pueden tener pinzas capaces de agarrar y levantar cargas de varias toneladas.
Robot industrial
Los brazos robóticos pueden estar equipados con cualquier tipo de herramienta. Estas herramientas se utilizan con una precisión, exactitud, velocidad y repetitividad que no pueden ser igualadas por los humanos.
Estos brazos robóticos pueden tener una multitud de sensores y sistemas de visión capaces de ver imágenes para ayudar a su control por ordenador. Esa información de los sensores y la visión puede utilizarse con la inteligencia artificial para tomar decisiones sobre el comportamiento del brazo robótico.
Los robots industriales y la automatización son una parte importante de la fabricación de la mayoría de los productos que se producen en el mundo actual.
Componentes principales de los robots industriales
Las cuatro partes principales de un robot industrial son el manipulador, el controlador, el dispositivo de interfaz humana y la fuente de alimentación.
El manipulador es el brazo y puede moverse en diferentes direcciones. En un robot industrial, la fuerza puede proceder de motores eléctricos, de la presión del aire en cilindros neumáticos o de la presión del fluido en cilindros hidráulicos.
El brazo tiene un controlador que es el «cerebro» del sistema. El controlador contiene el código de programación y recibe señales del sistema (entrada), procesa las señales y luego envía señales al sistema (salida) para controlar el robot.
Un tipo de entrada puede provenir del dispositivo de interfaz humana, como un teach pendant. Estos dispositivos pueden utilizarse para programar el brazo y controlar su movimiento.
El último componente es la fuente de alimentación, que es donde un robot industrial obtiene la energía para su controlador y sus actuadores. Suele ser en forma de energía eléctrica.
Ventajas de la automatización industrial
Una mayor tasa de producción es la razón número uno para invertir en un sistema de robots industriales. Los robots no experimentan fatiga ni se ralentizan tras un funcionamiento continuo. Si se diseñan, manejan y mantienen adecuadamente, pueden reducir eficazmente los tiempos de producción. Su velocidad de procesamiento es mucho mayor que la de los humanos. Esto les permite realizar una serie de movimientos calculados y rápidos, independientemente de su complejidad.